¿Conoces la diferencia entre la promotoría y la promoción? Aunque parezca que ambos términos se refieren a lo mismo, en realidad no es así y si quieres aprovechar al máximo los beneficios de cada uno, primero debes conocer sus características principales. ¡Continúa leyendo!
La promotoría hace referencia al conjunto de actividades que están pensadas y diseñadas para brindar soluciones en el punto de venta. Comprende la exhibición de productos conforme a un planograma o espacios que determinan los retailers con el objetivo de generar reconocimiento de marca, acercar los productos a los consumidores, etc.
La promoción se relaciona con la comunicación del producto. De acuerdo con Jerome McCarthy y William Perreault, en su libro Marketing: planeación estratégica, de la teoría a la práctica, mencionan: “la promoción consiste en transmitir la información entre el vendedor y el comprador potencial para influir en sus comportamientos y actitudes”.
La ejecución de estrategias de promotoría está encaminada a mejorar los esfuerzos comerciales de una marca para incrementar el número de clientes y optimizar las acciones de promoción en el punto de venta. Así mismo, esto se relaciona con conocer los deseos y necesidades de los consumidores para ofrecerles aquello que realmente buscan.
Por ello, a la promotoría se le atañen diversos beneficios como acelerar la adquisición de los productos, brindar al consumidor la mayor información posible sobre el producto, generar interés en las marcas, impulsar la prueba del producto y muchos otros que en conjunto llevan a las empresas a tener un óptimo posicionamiento en el mercado.
Por su parte, la promoción, en los últimos años, se ha convertido en un pilar fundamental en las estrategias de marketing debido a que tiene un fuerte impacto en los mercados de consumo y en función de los objetivos particulares de cada empresa y de las herramientas que disponga, se pueden aumentar considerablemente sus beneficios.
Aunque es inminente la diferencia entre la promotoría y la promoción, cabe destacar que ambas guardan un objetivo en común, pues buscan la atracción de los consumidores, siguiendo una serie de pasos hasta fidelizarlos. En palabras más sencillas, las dos aluden a la metodología ganar-ganar con la que empresas y clientes se benefician mutuamente.
Añade los beneficios de la promotoría a tu negocio
La promotoría es un servicio clave que ha permitido crecer a los mejores negocios del retail y saber aprovechar los beneficios que ofrece, es indispensable para escalar cada peldaño de la estrategia hasta lograr los objetivos y la adecuada satisfacción de los clientes. Por ello, contratar una agencia de promotoría es una buena inversión.
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